El que no inventa no vive.

Ana María Matute

viernes, 17 de junio de 2011

Regreso

Volverás a mí

cuando tus ojos solo proyecten

sombras confusas

de una realidad que se escapa.


Cuando tus dedos

distraigan carencias

amainando temblores.


Y tus piernas,

ayer bastiones de firmeza absoluta,

busquen el consuelo

de quietos remansos.


Pero volverás.


Y las tardes calladas,

ayer preludio

de noches de caos y gemidos,

mañana, antesala del silencio

de la noche eterna.


Y volverás a mí,

porque solo en mí

hallarás el camino fácil

de la última sonrisa.

miércoles, 8 de junio de 2011

Pronombres personales

Cuando mi cuerpo se abrió

en desgarros de vida,

supe que dejaba de ser Yo

para ser Tú y Tú.


Y entonces todo se hizo pequeño:

las caricias plenas de corto recorrido,

las palabras alargadas que llegan a lo mínimo,

las noches breves de sueño fragmentado.


Ayer.


Vuestras sonrisas cambian cada día

el gesto trágico con el que la vida
afronta su representación cotidiana.


Mis manos intentan

–hasta la fatiga–

atrapar el desbordado vuelo

de vuestra alegría.


Hoy.


Tú y Tú

son palabras que crecen;

mientras,

Yo envejece.


Mañana…

jueves, 2 de junio de 2011

Equilibristas



Reniego

de las palabras huecas,

meros fuegos de artificio

de soledades falsas

y desgarros fingidos.


Rimas atropelladas

asesinas del ritmo;

arabescos del arte

filigranas sin sentido.


Cuadraturas de círculos sonoros

estrofas buscando equilibrio

tormentas inventadas o soñadas

susurros de ángeles caídos.


Abandonad, tormentas inventadas,

la cueva de los sueños.

Sacudid, musas, mi espacio yermo.


Brota la tinta de mis dedos…

trazando la memoria de tantas heridas.


De mis ojos…

borrón de lágrimas esquivas.


Brota imparable

en un caos de líneas dolidas.